El único método con una estructura interna

que combina la precisión alemana con la puntualidad británica

Al ponerse en contacto con varias academias de inglés o alemán y a preguntar por la duración requerida para alcanzar un cierto nivel del idioma, normalmente no se consigue una respuesta concreta. Solo dicen: "Todo depende del alumno".

¿Por qué es una respuesta sumamente engañosa?

VEITH Group, la única opción seria para cursos de inglés y cursos de alemán, te dice la verdad:

"Todo depende del alumno" lo dicen, por un lado, para mantener al alumno más tiempo estudiando y pagando las tasas, porque al no haber un compromiso de duración establecida para llegar de un punto "A" a un punto "B", es más sencillo argumentar que faltan más de 200 horas de clase para estudiar un contenido que podría aprenderse fácilmente en tan solo 50 horas – y así logran cobrar cuatro veces más dinero.

En segundo lugar, al no fijar una cantidad de horas para un cierto plan educativo, la academia no necesita asumir ninguna responsabilidad si al final del curso el alumno no ha alcanzado los objetivos en el tiempo prometido.

En cambio, VEITH Group proporciona el programa didáctico más sistematizado, más lógico y más rígidamente estructurado, que funciona y se reglamenta a base de un exhaustivo manual didáctico que actúa como un guion, ya que prescribe con exactitud y delimita minuciosamente lo que se debe enseñar en qué clase e incluso de qué manera: cuáles unidades lectivas, qué temas de conversación, qué ejercicios de gramática, fonética y de vocabulario. Esta precisión requiere de una preparación concienzuda por parte del claustro docente y evita que un profesor se prepare cinco minutos antes de empezar la clase o en el metro de camino a la academia.

Por esta exactitud, se logra el máximo estándar de enseñanza, de modo que todos los profesores transmitan estrictamente el mismo temario con las mismas explicaciones, lo que permite, por ejemplo, sustituir a un profesor sin afectar el flujo del curso o brindar al alumno la máxima flexibilidad a la hora de recuperar una clase, dado que se conoce cabalmente en qué día y a qué hora se dará el contenido de la clase perdida en un curso paralelo.

En consecuencia, se puede afirmar a un alumno con máxima asiduidad cuánto tiempo requiere para progresar en el aprendizaje del idioma, permitiéndole planificar los objetivos de tiempo. Asimismo, obtener resultados evidentes a muy corto plazo porque se fijan nuevas metas cada mes y no solo un seudo-objetivo "tal vez en cinco años". Todo esto convierte al sistema de enseñanza VEITH en el más acelerado y el más dinámico de la actualidad, hasta tres veces más rápido que la competencia, es decir, la mejor academia para aprender inglés y aprender alemán en Madrid.

Obviamente, considerando el precio por unidad lectiva, habrán academias que captan a los alumnos con "gangas súper económicas", como es el caso de "fulanito y menganito" que, por el hecho de hablar inglés y tener una pasión por fish'n chips, deciden abrir una academia de inglés: alquilan un piso con dos habitaciones, ponen pizarras, pupitres y "listo". Todo muy barato, y por eso la hora de clase la ofrecen a cinco euros. Pero ojo: la academia "low cost" es como un bufet libre – te atiborras a un módico precio, pero con riesgo a enfermarte por la baja calidad de los alimentos.

Es importante recordar que una mayor velocidad en el aprendizaje significa también una menor inversión financiera, lo que convierte a las academias de idiomas de  VEITH Group en las más económicas del mercado, en correspondencia al progreso lingüístico alcanzado y la cantidad de unidades lectivas contratadas. Una excelente relación costo-calidad-beneficio.